domingo, 19 de febrero de 2012

Me llamo Rosana y soy gorda

¿Creéis que al gordo le gusta estar gordo?
Buena parte de vosotros pensareis que sí, que se está gordo por que se quiere.
Pero yo os digo, NO, no es tan fácil, no es una simple cuestión de dejar de comer. El dejar de comer, o mejor dicho el comer adecuadamente, es el resultado, el resultado de haber puesto en orden unos complejos mecanismos de nuestra mente.
Pero es así de duro, a una niña anoréxica se le alenta a serlo, y a una gorda se le discrimina. Qué sociedad la nuestra, en cualquier caso se les machaca.
Yo ahora con 5 tallas menos, pienso, siento y vivo como lo hacía antes. Hay quien pensará ahora está mejor. Y yo le digo, SI, ahora estoy mejor, por que antes de empezar a adelgazar habia medio ordenado mi mente, y lo que se ve es la consecuencia.
Quizá por mi edad y por mi carácter yo no me he sentido discriminada, mi familia y mis amigos han estado y están ahí. Pero si he ocultado mi cuerpo, me avergonzaba, siempre iba con lo que yo llamaba mis capitas.
Ahora hecha una descocada, quiero deciros que el proceso es laborioso, pero no imposible; que existen dietas y métodos para alcanzarlo, pero que no os servirán de nada sin lo fundamental, aprender a QUEREROS.
Cuando uno se quiere, los de alrededor lo perciben y ya no pueden discriminar. Y si lo hacen, es que no te convienen en absoluto.
Recordad QUERER ES PODER.
Rosana.